Reseña Cinéfila | Yuli | El Café De Las Cinco

Hoy os traigo, la reseña (a mi manera, como siempre) de ‘Yuli’.

‘Yuli’ es una película que llevaba mucho tiempo en «mi lista» de Netflix y, al fin, gracias a las vacaciones de Semana Santa he podido verla.

‘Yuli’ es una película biográfica del bailarín cubano Carlos Acosta. El film es un viaje temporal a través de su vida, desde niño hasta la actualidad, en la que el mismo Carlos Acosta se da vida en la película. Carlos Acosta fue el primer bailarín negro en interpretar papeles super conocidos en el ballet como el de Romeo (en Romeo y Julieta) en compañías como la Royal Ballet de Londres entre otras.

La película nos presenta a Carlos y a su familia, compuesta por sus padres y sus dos hermanas mayores, una de las cuales sufrió esquizofrenia y se suicidó (según la película) en el malecón de La Habana cuando Carlos ya era mayor.

En ‘Yuli’ te hacen entender que Pedro, el padre de Carlos, para que éste no se meta en problemas y no esté en las calles haciendo nada, lo lleva a la Escuela Nacional de Ballet de Cuba y después de lo que parece ser una audición, lo aceptan para ser un alumno más. Sin embargo, Yuli, que es el apodo de Carlos, no quiere ser bailarín (a pesar de tener un don para ello) y es su padre el que, de alguna manera, lo fuerza para serlo, ya que Pedro realmente cree y sabe que su hijo tiene un talento natural para la danza.

Debido a esto, un día Yuli se escapa de una clase de ballet y por circunstancias varias pierde la oportunidad de seguir siendo alumno de la Escuela Nacional de Ballet de Cuba. Aun así, la mujer a la que él, años más tarde, llama «maestra» le recomienda ir a otro centro, fuera de La Habana y lejos de su familia. Yuli se niega pero finalmente acaba yendo.

En esa época de su vida y en la película muestran que Yuli se sentía muy solo en aquel lugar. Al fin y al cabo era un niño y estaba lejos de su familia. Hay un momento en que su voz en off dice una frase que me gustó mucho y me hizo reflexionar durante todo el film.

La soledad no te abandona nunca – Carlos Costa

La película va transcurriendo y te das cuenta que la directora usa el presente y el pasado de una manera muy peculiar, pero ideal para lo que quiere explicar.

El actual Carlos Acosta utiliza el ballet, y lo que parece ser su compañía, para contar su historia, y en muchas ocasiones lo que parece ser presente, en realidad es pasado hecho ballet.

Desconocemos cuando Yuli empieza a ser un bailarín de ballet conocido (al menos eso en la película no se explica), pero sí vemos como es bailarín protagonista de varios ballets, en varias compañías y acaba en Londres, donde en un momento de despiste, pensando en su familia, se lesiona y vuelve a La Habana cansado y decidido a no bailar más.

Obviamente sabemos que siguió bailando, y así fue, una vez más, gracias a su maestra, que le dice que no puede tirar por tierra todos sus propios esfuerzos y los de su alrededor.

En la película, Yuli tiene un acercamiento con una mujer joven, pero no sabemos mucho más sobre su vida sentimental a raíz de la película. Lo único que sabemos es que ama a su tierra, a su familia y a su gente por encima de todo.

Y eso queda demostrado al final del film, que justo al lado del Capitolio, en el Gran Teatro de La Habana, representa que Carlos Acosta, presenta su obra Yuli en su ciudad natal, Cuba.

Desde mi punto de vista, hay algunos aspectos en la película que se dejan, un poco, a lo que la audiencia interprete, como por ejemplo en qué momento de la historia cubana está sucediendo la película (que es el que más desconcertada me tuvo a mi mientras vi el film) o el mismo final.

De todas maneras, y a pesar de, en muchos momentos, no entender muy bien lo que decían (por su acento) y de hacerse un pelín larga, me gustó mucho e incluso me emocioné al final.

Carlos Acosta, a pesar de no querer ser bailarín, se convirtió en el primer bailarín negro, en interpretar papeles escritos para blancos. Hizo historia y, a pesar de haber tenido una infancia dura lejos de la familia y de casa, con disciplina y sacrificio consiguió todo lo que muchos hubiesen querido en aquel momento.

La recomiendo a aquellas personas que les gusten las películas biográficas; la danza o el ballet y tengan un amor especial por Cuba (a pesar de que no toda la peli transcurra en el país).

Nada más por hoy y recordad las sabias palabras de este bailarín cubano.